Tarjetas de cartulina sencillas y originales.

Desde pequeña me gusto hacer mis propias tarjetas de felicitación, recuerdo que se las mandaba para felicitar tanto un cumpleaños como las navidades, cada una de ellas intentaba personalizarla un poco procurando conocer un poco el gusto de aquellos a los que iban destinadas.
Son sencillas y lo mejor es que podemos usar un sin fin de materiales ..  cartulina , telas, fieltro, pasta, lazos, encanjes, botones, purpurina, flores secas ..... yo que se.... de todo!
En realidad para hacer una bonita tarjeta de felicitación solo es necesario algo de tiempo y ponerle cariño .. ejem  ... y algo de buen gusto :(

Estas que os enseño hoy las hice para el día de la madre y las mamis quedaron encantadas.

Cartulina naranja , el interior es turquesa, cartulinas metalizadas para los corazones, lazo rosa, y el corazón central esta hecho pegando pequeñas flores de tela. Como se puede ver al quitar el lazo la postal se abre y podremos escribir la dedicatoria .

Aquí esta la producción al completo para el día de la madre.
Una para la abuela Né   y las dos iguales una para mi suegrii y otra para mi  mamii.
Acompañar un regalito por muy modesto que sea con algo hecho por nosotros es especial.
Suelo disfrutar mucho haciendo este tipo de manualidades el resultado siempre es bueno, y la formula .. hacerlas con cariño para las personas que quieres.

Esta tan preciosa me la hizo mi hija Patricia ..... me encanta, gracias amor!!
( seguramente por eso se paso en su cuarto encerrada un buen rato con la música a no poder mas) o quizas no....!!! en fin  me sorprendió y ya la veis es preciosa.

A pesar del retraso en publicarlas espero sirvan de orientación por si os animáis en hacelas y no comprar las clásicas de siempre.

Para los cafeteros.

El café es parte de nuestro día a día. A la mañana, después de una comida, o en cualquier momento del día. Lo tomamos en grandes cantidades.
Para seguir disfrutando del café los días de mucho calor, pueden probarlo bien helado y descubrir una bebida totalmente diferente. Cuando se enfría mucho, el sabor cambia sutilmente. Se vuelve más suave, y recuerda a las avellanas.


Café Frappé:
Para los que les gusta el café con leche.
Preparar un café bien fuerte. Puede ser de filtro, espresso o instantáneo. Agregarle el azúcar mientras esté caliente para que se disuelva mejor.
En un vaso de mixer o licuadora, poner leche, un poco de crema (opcional), esencia de vainilla, bastante hielo y el café ya endulzado.
Licuar hasta que quede bien espumoso. Para servirlo, espolvorear con cacao amargo.


Café frío: para los amantes del café negro.
Preparar un café negro fuerte, preferentemente espresso. Agregar muy poca azúcar cuando el café está caliente. Colocarlo en un vaso alto con mucho hielo y toque de canela. Revolver bien y tomar enseguida.

Café vietnamita: para los golosos.
En un vaso poner leche condensada. Y agregarle café negro y hielo. Mezclar bien y tomar. Los vietnamitas utilizan un filtro individual del tamaño del vaso y el café gotea lentamente sobre la leche condensada. Es muy tentador porque vemos como se va fundiendo lentamente el café con la leche condensada y hay que esperar para tomarlo.

Sugerencia: Si les gusta, pueden agregar un poco de su bebida alcohólica favorita (whisky, ron, vodka, etc.).